Pero en qué se diferencia un espacio de Coworking Virtual de un espacio de Coworking tradicional, físico.
Espacio Físico
En un espacio de COWORKING tradicional, contamos con una infraestructura física mucho más competitiva y cómoda que la que tenemos trabajando en nuestra casa. Podemos disponer de sala de juntas y de reunión donde recibir a nuestros clientes. Un lugar donde separar vida laboral y personal. Nos podemos relacionar con otros profesionales y compartir un café o algún proyecto.
Decoración
Además, en un centro de coworking se busca que el espacio y la decoración sea un tanto «singular», saliendo del típico mobiliario de oficinas, y que sea un lugar multifuncional donde desarrollar otro tipo de actividades culturales.
Evolución del coworking
La evolución del coworking durante los últimos años ha provocado que surjan muchos espacios que básicamente cubren las necesidades de tener una oficina a bajo coste. Pero hay algunos espacios que destacan por su implicación a nivel social, generando impactos beneficiosos para su localidad. Esto aporta mucho valor a los coworkers, y fomenta su participación. Dichos espacios se convierten en un foco de negocio, innovación y provocan movimiento social en sus áreas de influencia.
Debido a eso, queda patente que un espacio de coworking es mucho más que un lugar de reunión. Lo importante es lo que se genera en estos lugares y los contactos y relaciones que surge. Además debido a la pandemia sufrida, los espacios de oficinas han dejado de ser el núcleo y se ha perdido esa relación tan estrecha entre las personas que habitualmente trabajan en estos espacios.
Es por ello que el coworking online es la evolución y la solución a los problemas de comunicación que esta situación plantea.
Un espacio online elimina todas las barreras. Puedes encontrar y relacionarte con personas de cualquier país o lugar.